El cáncer de estómago, también llamado cáncer gástrico, puede ser difícil de identificar, esto es particularmente cierto cuando se encuentra en sus etapas iniciales, en las cuales no se presentan síntomas. Además, la mayoría de las personas no le prestan mucha atención a los síntomas del cáncer de estómago debido a que son sutiles, por estas razones, el cáncer de estómago se extiende de manera significativa antes de que sea identificado.
Hay tres síntomas principales del cáncer de estómago: indigestión, pérdida de apetito, y la acidez estomacal. Estos síntomas no deben ser ignorados, ya que existe cura para el cáncer de estómago, siempre y cuando se detecte en las primeras etapas. Una persona que experimenta la indigestión debido al cáncer de estómago puede sentir una sensación de ardor en la parte superior del abdomen o el estómago. El exceso de gases y los eructos o náuseas también hacen parte de los síntomas del cáncer.
La persona también puede sentir dolor abdominal en general, sentir sonidos en el estómago, o desarrollar un sabor ácido en la boca. Si se experimenta indigestión todos los días se debe acudir al médico para hacerse la prueba de cáncer de estómago. Una persona con cáncer de estómago también experimenta falta de apetito, lo que provoca una sensación de saciedad a pesar de comer muy poco. Además, la persona puede sentir ardor en el estómago que ocurre en lo profundo dentro del pecho. Otro síntoma del cáncer de estómago es la sangre en las heces. A menudo, esto sólo es identificado después de una prueba de sangre oculta en heces, sin embargo, puede notarse antes de ver a un médico y se presenta como un aspecto negro o color de arcilla en las heces. Normalmente, la sangre en las heces es una señal de que el cáncer de estómago ya se ha extendido.
Los síntomas del cáncer de estómago en sus etapas más avanzadas incluyen pérdida de peso inexplicable, sangre en el vómito y el dolor después de comer. Una persona con cáncer de estómago experimenta hinchazón después de comer, ictericia, o sensación general de cansancio o debilidad. El cáncer, a parte de los tratamientos médicos, puede tratarse con cambios en los hábitos de vida, terapias alternativas, remedios homeopáticos y procedimientos naturales.
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